En el ejercicio de la medicina una de las principales herramientas terapéuticas es el uso de medicamentos, pero, para utilizarlo de manera adecuada se debe seguir una prescripción en las mejores condiciones posibles, una correcta dispensación y finalmente, una apropiada administración para lograr su objetivo: Ayudar en la prevención, el tratamiento y el restablecimiento que requiera cada paciente, quien es partícipe de su autocuidado, por lo que el papel de la responsabilidad es indispensable para seguir al pie de la letra las indicaciones para la toma de medicamentos.
Según la Organización mundial de la Salud (2015), para lograr un uso racional de los medicamentos los pacientes debes recibir la medicación que se ajuste de la mejor manera a sus necesidades clínicas, con las dosis exactas dependiendo de los requisitos de cada uno, el tiempo también cumple un factor fundamental que va de la mano con el costo, el cual debe ser el menor posible; además, recalcan en que el medicamento sólo debe ser usado cuando sea necesario, comprendiendo el porqué se usó y entendiendo si se deben utilizar en dosis, intervalos o períodos de tiempos establecidos por un profesional de la salud.
Los usos principales de los medicamentos son:
o Prevenir: son conocidos como una estrategia básica de la medicina, si se previene una enfermedad, se ahorran gastos y esfuerzos en la cura o en el tratamiento de esta, un ejemplo de esto podrían ser las vacunas.
o Aliviar: cuando el paciente presenta algunos síntomas o signos que indican enfermedad, los medicamentos sirven como analgésicos o antiinflamatorios que funcionan para disminuir lo más que puedan estas molestias.
o Controlar: en enfermedades que aún no cuentan con una cura o que son crónicas (de larga duración), se utilizan los medicamentos para evitar que el avance de la enfermedad se dispare.
o Diagnosticar: por medio del uso de medicamentos se puede ver varias partes del organismo como el corazón, las vías renales, exploraciones gastrointestinales, entre otros.
o Curar: los medicamentos pueden eliminar lo que está causando la enfermedad, como lo son los antibióticos, que alivian las infecciones bacterianas.
Para el uso de los medicamentos, se realiza un plan terapéutico, que hace referencia a todas las acciones dirigidas a conseguir resultados precisos en base al diagnóstico de la situación. Aquí el médico tiene en cuenta algunos aspectos para realizar de manera adecuada su propuesta: la edad, el contexto socio-cultural, otras enfermedades asociadas, los hábitos dietéticos, el consumo de otros medicamentos, el consumo de otras substancias, como el alcoholo cigarrillos, el sedentarismo, entre otros, estos deben ser modificados eventualmente, por lo que el personal de salud médico realiza una evaluación periódicamente donde observan los resultados de la condición del paciente para modificar o seguir con el plan inicial.
Para el plan terapéutico de los medicamentos se tiene en cuenta: el medicamento, la dosis (donde incluye la edad, el peso y la indicación médica), la vía de administración (oral, parental o inyectable, nasal, cutánea, rectal, vaginal u oftálmica), la frecuencia (número de veces que debe ser administrado al paciente) y la duración.
Referencias
Ramos, G. & Olivares, G.(2010). Uso racional de medicamentos: Una tarea de todos. División de políticas públicas saludables y promoción.
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